viernes, 19 de octubre de 2007

Pequeños Hombres vs. Guerreros Poderosos (Liderazgo de Gedeón)

Introducción
Hace no mucho tiempo estuvimos viendo algunas características de la personalidad de Josué, este líder de gran influencia tuvo la tremenda misión de tomar la tierra prometida que Dios le había prometida al pueblo de Israel. Sin embargo no sabemos por que causa, este siervo de Dios era un hombre “inseguro”, pues la palabra nos muestra que Dios mismo le repite 4 (cuatro) veces que estaría con él y que fuera esforzado y valiente (ver el 1º capítulo del libro de Josué), es más el Señor le manda a Moisés a que lo instruya y lo afirme. Por otra parte son los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés, los que le dicen a Josué que como estaban con Moisés estarían con él, que solo le pedían que Dios estuviera con él y que fuera valiente (ver Josué 1:17-18).
Esta condición no detuvo a Josué, pues vemos en todo su libro como tomo la tierra venciendo a sus enemigos, y como mientras el vivió marco a fuego (con tu testimonio de vida) al pueblo de Dios de tal modo, que Israel no se aparto del camino de Dios, y aún fue así mientras vivieron los ancianos contemporáneos de Josué (después de que este falleciera).

Hoy vamos a ver a alguien que tenía ciertas características similares a las de Josué, también era un hombre inseguro y con baja autoestima, sin embargo Dios uso a este hombre para librar a Israel de la manos de los Madianitas, su nombre era Gedeón.
Después de la muerte de Josué, el pueblo de Dios fue gobernado por Jueces Gedeón era el sexto juez. En su época, el pueblo de Dios estaba oprimido por los madianitas y los amalecitas. 135.000 tropas enemigas entraron a la tierra para destruirla. El pueblo de Dios estaba oprimido y empobrecido, fue entonces que clamó al Señor por liberación y Dios los escucho.
Gedeón no era más que un hombre común

Contexto histórico y situación

1 Los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová; y Jehová los entregó en mano de Madián por siete años. 2 Y la mano de Madián prevaleció contra Israel. Y los hijos de Israel, por causa de los madianitas, se hicieron cuevas en los montes, y cavernas, y lugares fortificados. 3 Pues sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas y amalecitas y los hijos del oriente contra ellos; subían y los atacaban. 4 Y acampando contra ellos destruían los frutos de la tierra, hasta llegar a Gaza; y no dejaban qué comer en Israel, ni ovejas, ni bueyes, ni asnos. 5 Porque subían ellos y sus ganados, y venían con sus tiendas en grande multitud como langostas; ellos y sus camellos eran innumerables; así venían a la tierra para devastarla. 6 De este modo empobrecía Israel en gran manera por causa de Madián; y los hijos de Israel clamaron a Jehová.
7 Y cuando los hijos de Israel clamaron a Jehová, a causa de los madianitas, 8 Jehová envió a los hijos de Israel un varón profeta, el cual les dijo: Así ha dicho Jehová Dios de Israel: Yo os hice salir de Egipto, y os saqué de la casa de servidumbre. 9 Os libré de mano de los egipcios, y de mano de todos los que os afligieron, a los cuales eché de delante de vosotros, y os di su tierra; 10 y os dije: Yo soy Jehová vuestro Dios; no temáis a los dioses de los amorreos, en cuya tierra habitáis; pero no habéis obedecido a mi voz.
(Jueces 6:1-10)


Hasta aquí podemos ver que Israel estaba atravesando por una situación sumamente difícil, como consecuencia de su propio pecado, situación que lo sumía en la pobreza casi absoluta y la desesperanza total. En medio de toda esta situación, Dios encuentra en el corazón de Gedeón el instrumento adecuado para librar a su pueblo de las manos de Madián.


El llamado de Gedeón

11 Y vino el ángel de Jehová, y se sentó debajo de la encina que está en Ofra, la cual era de Joás abiezerita; y su hijo Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar, para esconderlo de los madianitas. 12 Y el ángel de Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón esforzado y valiente. 13 Y Gedeón le respondió: Ah, señor mío, si Jehová está con nosotros, ¿por qué nos ha sobrevenido todo esto? ¿Y dónde están todas sus maravillas, que nuestros padres nos han contado, diciendo: ¿No nos sacó Jehová de Egipto? Y ahora Jehová nos ha desamparado, y nos ha entregado en mano de los madianitas. 14 Y mirándole Jehová, le dijo: Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo? 15 Entonces le respondió: Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. 16 Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre. (Jueces 6:11-16)

De aquí podemos sacar varias enseñanzas:

1º) Dios llama siempre a personas ocupadas: La palabra de Dios nos dice en el vs.11 que Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar, para esconderlo de los madianitas. No se estaba lamentando tirado en el granero, no estaba llorando de brazos cruzados, estaba trabajando para que su familia tuviera que comer.
Paso lo mismo cuando Jesús llamo a Simón, Jacobo y Juan (hijos de Zebedeo), ellos estaban arreglando las redes; o cuando Jesús llamo a Mateo, que estaba cobrando impuestos. Cuando Elías recluto a Eliseo, este estaba arando el campo; o cuando Samuel manda a llamar a David para ungirlo rey de Israel, estaba pastoreando las ovejas en el campo.

2º) Dios llama a las cosas que no son como si fueran: Fíjense como el ángel de Dios saluda a Gedeón “Jehová está contigo, varón esforzado y valiente”

3º) Nuestra perspectiva no siempre es la perspectiva de Dios: Fíjense lo que le dice el enviado de Dios: "Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo?" Evidentemente Gedeón no se consideraba con mucha energía pues le responde: “Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre”

4º) El Señor siempre esta con nosotros cuando hacemos su voluntad: “Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre”

Gedeón derroto a los Amalecitas y los Madianitas (un ejercito de 135.000 hombres) con un pequeño ejercito de 300 hombres valientes. Pero no solamente derroto a los enemigos de Dios (que nunca pudieron levantar cabeza) sino que también le dio a Israel un período de paz que duró 40 años.


Como termino la historia

28 Así fue subyugado Madián delante de los hijos de Israel, y nunca más volvió a levantar cabeza. Y reposó la tierra cuarenta años en los días de Gedeón.
29 Luego Jerobaal (Gedeón) hijo de Joás fue y habitó en su casa. 30 Y tuvo Gedeón setenta hijos que constituyeron su descendencia, porque tuvo muchas mujeres. 31 También su concubina que estaba en Siquem le dio un hijo, y le puso por nombre Abimelec. 32 Y murió Gedeón hijo de Joás en buena vejez, y fue sepultado en el sepulcro de su padre Joás, en Ofra de los abiezeritas.
33 Pero aconteció que cuando murió Gedeón, los hijos de Israel volvieron a prostituirse yendo tras los baales, y escogieron por dios a Baal-berit. 34 Y no se acordaron los hijos de Israel de Jehová su Dios, que los había librado de todos sus enemigos en derredor; 35 ni se mostraron agradecidos con la casa de Jerobaal, el cual es Gedeón, conforme a todo el bien que él había hecho a Israel.
(Jueces 8:28-35)


CONCLUSION:
Que Dios pueda usar nuestras vidas pequeñas e inseguras para extender su reino y mostrar su gloria, como lo hizo con Gedeón, un hombre que no miró sus inseguridades sino que se atrevió a ver más allá de sus imposibilidades, confió en Dios y este lo premio sobremanera. Una vez más la palabra se hace realidad en nuestras vidas y como decía el apóstol Pablo: “Cuando soy débil entonces soy fuerte”. Amén.