martes, 11 de diciembre de 2007

Líderes Intrépidos

Introducción
Hoy vamos a ver, como la determinación de un solo hombre con la ayuda de Dios, cambio el balance de una batalla que estaba perdida e inspiró al resto del pueblo de Dios, guiándolos hacia la victoria.

Contexto histórico y situación
Corría el siglo XI a.C. en donde Saúl gobernaba como el primer rey de Israel; el pueblo Filisteo hostigaba al pueblo de Dios, por lo tanto se estaba entablando una batalla de envergadura apocalíptica. El ejercito enemigo (Filisteo) estaba integrado por: 3000 carros, 6000 jinetes y un ejercito numeroso “como la arena del mar”, el cual había enviado a tres compañías de avanzada para empezar a atacar a Saúl. Hay que destacar que todo este pueblo estaba armado con espadas pues conocían el arte de la herrería.

Por el otro lado (Israel), de los 3000 hombres que estaban con Saúl y Jonathan, sólo quedaban 600, que estaban muertos de miedo. Es digno de destacar que en este ejercito sólo había 2 (dos) espadas que estaban en poder de Saúl y su hijo, pues que los Filisteos no permitían que los israelitas tuvieran herreros, por lo cual cuando los hebreos tenían que afilar sus azadones, sus hoces o el filo de los arados tenían que recurrir a sus enemigos y estos les cobraban el servicio entre 4 y 8 gr. de Plata.

En medio de esta situación Jonatán y su escudero se embarcaron en una misión imposible:


6 “Dijo, pues, Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos. 7 Y su paje de armas le respondió: Haz todo lo que tienes en tu corazón; ve, pues aquí estoy contigo a tu voluntad” (1º Samuel 14:6-7)

13 “Y subió Jonatán trepando con sus manos y sus pies, y tras él su paje de armas; y a los que caían delante de Jonatán, su paje de armas que iba tras él los mataba. 14 Y fue esta primera matanza que hicieron Jonatán y su paje de armas, como veinte hombres, en el espacio de una media yugada de tierra” (1º Samuel 14:13-14)

1º)El Señor necesita a hombres como Jonatán, intrépidos, que sean capaces meterse en territorio del enemigo y tomar la heredad que Dios les promedio a sus hijos.

2º) Jonatán era un hombre que no miraba sus limitaciones o se basaba en su fuerza, él creía en la matemática de Dios.

3º) Jonatán era un hombre con las mismas características que David, pues sólo le importaba que Dios estuviera con él. David (tiempo después) hace una proeza semejante cuando vence a Goliat con una piedra y una onda. Creo (y esta es mi opinión personal) que por eso ellos eran tan amigos y se querían tanto.

4º) Jonatán sabía que el secreto de la bendición de Dios estaba en la obediencia:

9 "Esperad hasta que lleguemos a vosotros, entonces nos estaremos en nuestro lugar, y no subiremos a ellos. 10 Mas si nos dijeren así: Subid a nosotros, entonces subiremos, porque Jehová los ha entregado en nuestra mano; y esto nos será por señal” (1º Samuel 14:9-10)

Esto nos recuerda lo sucedido cuando el apóstol Pedro le pidió permiso al Señor Jesucristo para ir hacia él sobre las aguas.


5º) Jonatán logro

A - que cundiera el pánico entre sus enemigos:

15 “Y hubo pánico en el campamento y por el campo, y entre toda la gente de la guarnición; y los que habían ido a merodear, también ellos tuvieron pánico, y la tierra tembló; hubo, pues, gran consternación”


B – que se mataran los unos a los otros:

20b “... y he aquí que la espada de cada uno estaba vuelta contra su compañero, y había gran confusión”


C – que volvieran los desertores al pueblo de Dios y de este modo ponerse al servicio del Rey:

21 “Y los hebreos que habían estado con los filisteos de tiempo atrás, y habían venido con ellos de los alrededores al campamento, se pusieron también del lado de los israelitas que estaban con Saúl y con Jonatán”


D – que volvieran los que estaban escondidos (los que tenían miedo):

22 “Asimismo todos los israelitas que se habían escondido en el monte de Efraín, oyendo que los filisteos huían, también ellos los persiguieron en aquella batalla”


6) El escudero no dudo en seguir a su señor y le acompaño en la misión que este le propuso (aún a costa de una muerte segura). Aquí vemos la importancia de los líderes de apoyo (la 2º línea de liderazgo), aquellos que sostienen las manos del líder o referente principal (como sucedió en el caso de Moisés, cuando Aarón y Jur le sostuvieron los brazos y el pueblo de Israel obtuvo la victoria de la mano de Josué).


Conclusión: El Señor (hoy en día) sigue utilizando “PERSONAS ORDINARIAS PARA PROPÓSITOS EXTRAORDINARIOS”. Sigue poniendo visión y pasión por esa visión en los corazones de sus siervos.
Ni la oposición más grande, ni el enemigo más poderoso, ni siquiera nuestras propias limitaciones, podrán impedir el cumplimiento de la voluntad de Dios, si le creemos a él y obedecer sus preceptos.